En estas vacaciones recibiremos un sinnúmero de visitantes, turistas de nuestro país y hermanos migrantes de la Unión Americana; queremos que nuestro pueblo luzca limpio y bonito, pero es necesario crear consciencia en nuestros hijos, en nosotros mismos y en las personas que nos visitan. Si todos ponemos nuestro granito de arena tendremos una ciudad limpia y digna de recibir los miles de visitantes que esperamos en los próximos días.